XXII

Escribir y vivir no son lo mismo,

mas cuando se hacen uno honda es la herida

si en cada acento el alma dolorida

ansias posa de amor con triste sismo.

Escribir y vivir son abismo

que precipita el daño de la vida

sometiendo el latido a recia brida

ciega voz, sordo pulso a mudo trismo.

A amargas mieles dulces hieles mecen,

y en lágrimas de ayer tejen los versos

los besos de mañana con pasión.

Escribir y vivir no se parecen,

mas cómo se entretejen siendo adversos

cuando, corazas, se hacen corazón.

© Juan Carlos Friebe

(Antagonía. Granada, Editorial Nazarí, 2015)