Ante el bombardeo de suposiciones, chismes, quejas de lo que estamos viviendo, mando este mail. Sé que no es fácil creer lo que vivimos, puesto que nunca habíamos estado en una situación como ésta. Pero creo que en vez de ayudarnos, nos estamos paniqueando más y engendrando odios que no sirven de nada. Las versiones van desde una guerra bacteriológica hasta un complot por parte del gobierno. Y como a mí no me gusta quedarme con dudas pues he preguntado en varios lados e investigado antes de hacer juicios a priori y sin fundamento que me lleven a mandar correos muy inmaduros que generan otro tipo de paranoias.
La enfermedad que se presenta es una influenza causada por un virus porcino. Se supone que este tipo de Influenza porcino se ha presentado en algunas personas que trabajan con cerdos, pero es muy, muy raro. Esta enfermedad viene de un virus que sólo afecta a los cerdos, pero ha mutado, lo cual no es sorpresa.
La gripa humana tiene sus temporadas y es raro que en los meses de marzo y abril se presente, pero si se han fijado, en esta temporada ha habido muchos casos, lo cual nos habla de los altos niveles de contaminación en los que vivimos y la desnutrición que tenemos al no consumir diversos alimentos. Sin embargo, a parte de este fenómeno, también empezó a haber casos de influenza que se trataba como la normal, pero hubo casos en los que la gente moría. Cuando pasa esto, se debe avisar a la Organización Mundial de la Salud, lo cual no se hizo aunque es parte del protocolo. Pero creo que esto es debido a cómo somos como mexicanos, irresponsables, pensando «no pasa nada» o dejándolo para otro momento.
Un ciudadano canadiense vino a nuestro país y llegó a su país enfermo, de tal forma que allá lo examinaron (sólo se puede hacer con una prueba de ADN) y al ver que la cepa que tenía no coincidía con una humana buscaron en otros tipos y ahí encontraron el virus de la influenza porcina. Pero ya era un poco tarde para controlar el contagio a otros países. En Estados Unidos se encontraron, hasta ayer, cerca de 18 casos.
Esta enfermedad no te mata si tomas el medicamento, que sólo debe ser administrado si te enfermas y presentas los signos. Porque los signos, porque como es una enfermedad de tipo viral, no sale en exámenes bacteriológicos y sólo se puede detectar por los síntomas que se han descrito en todos los medios.
No se permite que la gente se junte en lugares públicos porque somos muy dados a decir, «sólo es una gripa«, pero es una forma en la que contagiamos a todos los demás, en el mejor de los casos con una simple gripa.
Salieron una reglas en las que pueden investigarnos y confinarnos, bueno, esto es porque así se realiza un cerco de salud, para evitar el contagio. Esto ha despertado especulaciones en las que el gobierno está haciendo de las suyas para controlarnos, pero pensemos que nosotros mismos hemos provocado esto. No sólo podemos pensar que Calderón, o el Peje, o el PRI son responsables de nuestra desgracia como nación. Nosotros hemos provocado esto con nuestra indiferencia y no me refiero al voto, sino a los actos de corrupción que hacemos, sabiendo que hacemos mal. Sacar a un país adelante no se trata de confrontar pobres contra ricos, colores o ideologías que sólo hablan de nuestros intereses, porque malos hay en todos lados, tanto pobres como ricos y de colores. Y más cuando le hemos dado un sobrevalor a la individualidad, al poder y al dinero que desvían nuestra atención de lo verdaderamente importante. O de que otra forma un niño respondería que de grande quiere ser narco. Sólo me queda la respuesta de enseñarle que primero es él y después él y no fomentarle el concepto de comunidad, ya que si mi comunidad está bien, yo estoy bien. La educación no sólo es formal, sino informal y no formal y en ellas todos colaboramos. Los niños aprenden de nosotros los adultos la forma de enfrentar la vida y sólo les hemos enseñado «yo ya chingué«, «yo lo sé todo«, «mientras yo esté bien, los demás que se mueran«, etc. Y no estoy hablando de igualdad, sino de respeto por nosotros como comunidad.
Volviendo a nuestro problema:
En el caso de que fuera una guerra bacteriológica como algunos apuntan, le pregunté a un genetista y me respondió que sí podría presentarse algo así, pero en realidad sale más barato una bomba que el desarrollo de una enfermedad como tal.
En el caso de que fueran los narcos y el gobierno esté haciendo una cortina de humo, pues pensemos lo siguiente, si es cierto, con salir y exponernos no resolvemos nada.
Y por otra parte, generarnos pánico, como algunos suponen, para controlarnos lleva costos muy altos, incluso para el propio gobierno. (Además que para eso tenemos el fútbol y la novela, que no son malos, siempre y cuando no nos enajene).
Analizando la situación, qué caso tiene detener económicamente a una población si no hay algo fuerte por detrás. Lo que quiero decirles es que dejen de especular y se cuiden. No se paniqueen, pero tampoco se expongan a lo menso. Y creo que es un buen momento para pensar que hemos hecho como pueblo para llegar a esta situación, porque es fácil señalar a los gobernantes que nos cuartan la libertad, pero nosotros les hemos dado ese poder y el caso no es agarrarse a trancazos y hacer plantones, es voltear hacia lo que hacemos día con día y hacia los pequeños y enseñarles otro tipo de vida.
Bueno, esto es una opinión, y no lo hago con mala intención, sino porque me da tristeza a lo que hemos llegado.
Guiomar Jiménez ©