«He
trabajado muy duro en este libro. Estoy a punto de terminarlo. Todo lo que me
falta ahora es realizar el irrealizable milagro que siempre tienes que hacer al
final», decía Hemingway sobre una de sus novelas, y lo difícil, lo “irrealizable”
es saber en qué consiste ese milagro.
trabajado muy duro en este libro. Estoy a punto de terminarlo. Todo lo que me
falta ahora es realizar el irrealizable milagro que siempre tienes que hacer al
final», decía Hemingway sobre una de sus novelas, y lo difícil, lo “irrealizable”
es saber en qué consiste ese milagro.
García
Márquez decía que las novelas no se terminan sino que se abandonan y, en este
caso, hay elegir el momento adecuado para decir basta.
Márquez decía que las novelas no se terminan sino que se abandonan y, en este
caso, hay elegir el momento adecuado para decir basta.
Son
palabras, consejos de dos premios Nobel, de dos buenos premios que deberíamos
tener en cuenta independientemente de que nos gusten más o menos sus escritos.
Nos están regalando sus experiencias como creadores, sus sensaciones a la hora
de escribir. No podemos pedirles que nos digan cuales son los “trucos” para
hacerlo porque ni podrían ni querrían si pudieran y, además, los trucos ajenos
sólo sirven para maravillarnos o para convencernos de que no era tan fácil como
decían.
palabras, consejos de dos premios Nobel, de dos buenos premios que deberíamos
tener en cuenta independientemente de que nos gusten más o menos sus escritos.
Nos están regalando sus experiencias como creadores, sus sensaciones a la hora
de escribir. No podemos pedirles que nos digan cuales son los “trucos” para
hacerlo porque ni podrían ni querrían si pudieran y, además, los trucos ajenos
sólo sirven para maravillarnos o para convencernos de que no era tan fácil como
decían.
Entonces,
¿no hay trucos? ¿Será la técnica? ¿Tengo que estudiar algo en concreto para
poder escribir? ¿Habrá que leer determinados libros, seguir a rajatabla los
decálogos?
¿no hay trucos? ¿Será la técnica? ¿Tengo que estudiar algo en concreto para
poder escribir? ¿Habrá que leer determinados libros, seguir a rajatabla los
decálogos?
También
hay algo a lo que se le suele llamar talento y que no es mensurable, ni se
aprende, ni se compra ni se vende. Es el aceite necesario para que los
engranajes funcionen, para que las palabras no chirríen unas al lado de otras,
para crear símiles nuevos, metáforas increíbles, literatura.
hay algo a lo que se le suele llamar talento y que no es mensurable, ni se
aprende, ni se compra ni se vende. Es el aceite necesario para que los
engranajes funcionen, para que las palabras no chirríen unas al lado de otras,
para crear símiles nuevos, metáforas increíbles, literatura.
Marco
Denevi dijo que «Lisa y llanamente, no hay técnica
que suplante al talento». Por eso hay quien dice que no se puede enseñar a
escribir confundiendo ambos términos. Cada vez que leemos estamos aprendiendo;
cada vez que escribimos intentamos hacerlo mejor y, con el tiempo, practicando,
los hábitos dejan de ser repeticiones monótonas para convertirse en fórmulas
aprehendidas. Y cuando llega ese momento en que creemos sinceramente que el
texto ya no puede mejorar, que hemos realizado el milagro “irrealizable”, es
justo cuando empieza otra parte fundamental del proceso creativo: la
reescritura, el, a veces, penoso trabajo de releernos y convertirnos en juez y
parte.
Denevi dijo que «Lisa y llanamente, no hay técnica
que suplante al talento». Por eso hay quien dice que no se puede enseñar a
escribir confundiendo ambos términos. Cada vez que leemos estamos aprendiendo;
cada vez que escribimos intentamos hacerlo mejor y, con el tiempo, practicando,
los hábitos dejan de ser repeticiones monótonas para convertirse en fórmulas
aprehendidas. Y cuando llega ese momento en que creemos sinceramente que el
texto ya no puede mejorar, que hemos realizado el milagro “irrealizable”, es
justo cuando empieza otra parte fundamental del proceso creativo: la
reescritura, el, a veces, penoso trabajo de releernos y convertirnos en juez y
parte.
Para
aliviar las penas nada como tener a alguien a tu lado sepa por lo que estás
pasando y lo que necesitas para continuar, porque «Tienes precisamente que continuar cuando peor está y sin ninguna
posibilidad de arreglo —con una novela sólo se puede hacer una cosa y es continuar
directo y hasta el final de la maldita novela», como le dijo Hemingway a Scott Fitzgerald.
aliviar las penas nada como tener a alguien a tu lado sepa por lo que estás
pasando y lo que necesitas para continuar, porque «Tienes precisamente que continuar cuando peor está y sin ninguna
posibilidad de arreglo —con una novela sólo se puede hacer una cosa y es continuar
directo y hasta el final de la maldita novela», como le dijo Hemingway a Scott Fitzgerald.
Si
tienen que decirte cosas que, incluso, puede que no te gusten, mejor que sea
alguien que sabe de lo que habla, y de lo que escribe.
tienen que decirte cosas que, incluso, puede que no te gusten, mejor que sea
alguien que sabe de lo que habla, y de lo que escribe.
